"El lugar estaba oscuro; más que oscuro, impenetrable, carente de cualquier existencia de luz; pero no era solo eso, tampoco había sonido alguno, como estar en una nada absoluta sin contacto con ningún tipo de realidad más que la profunda negrura, solo la vasta oscuridad, tanta que casi parecía física, que podía sentirla en la piel… o tal vez fuera algo más, sí, había algo más. Poco a poco, Jerry empezó a recobrar el control sobre su cuerpo, ya no eran solo sensaciones. Su mente se empezaba a despejar, su cuerpo le volvía a pertenecer. Ahora no solo era una intuición o una sensación; era una certeza, había algo más, algo duro, áspero al contacto, parecía madera… una silla, eso era; pero había más, algo le restringía el movimiento, algo frío y suave, se sentía como si fuera inamovible… “Hierro”, pensó, y eso era: abrazaderas de hierro sólido que apresaban sus manos y tobillos".
La miseria del artista literario reduce su porvenir a dos senderos transitables y uno hercúleo. El primero conduce a la prostitución del arte en favor de las demandas del mercado; a su vez que el segundo acarrea la anónima muerte del fiel idealista. La tercera, la hercúlea, se proscribe Incluso a generaciones enteras para luego emerger abundante en reducido territorio como burla providencial; hablo, claro, del genio ignoto que trasciende espacio y tiempo. ¿No es de enajenado aspirar a tan divino propósito? Un necio me respondió una vez que el tercer sendero es: o una sobrevaloración del primer camino, o un fortuito azar del segundo.
“Qué cosa más sorprendente es un libro. Es un objeto plano, hecho de un árbol, con partes flexibles en las que están impresos montones de curiosos garabatos. Pero, cuando se empieza a leer, se entra en la mente de otra persona; tal vez de alguien que ha muerto hace miles de años. A través del Tiempo, un autor habla clara y silenciosamente dirigiéndose a nosotros y entrando en nuestra mente. La escritura es, tal vez, el más grande de los inventos humanos. Une a personas que no se conocen entre sí. Personajes de libros de épocas lejanas rompen la cadena del Tiempo. Un libro es la prueba de que los hombres son capaces de hacer que la magia funcione”.